martes, 13 de febrero de 2018

Tus tardes de domingo

Soy reina sin reino,
sin hogar
y sin castillo,
soy reina del olvido
y de las cosas que he temido,
soy reina de los árboles
y reina entre el frío
del valle de costillas
de mi corazón vacío.
Una vez tuve reino
y fue un lugar bello y florido,
mas una espina de rosa
se clavó en mi tobillo
y fui por el camino
perdiendo tanta sangre
que me hice de alambre,
carne mustia y hierro frío.
Y cuando vi caído
mi cielo, en la tierra
arrojé mi vestido
y al corazón más piedras
y ahogué los sentidos,
me hice de madera,
pues lo muerto ni espera
ni se siente vencido.
Mas se coló una hiedra
entre tanto hastío
y el verde de la hierba
y del pájaro el trino
a veces me recuerdan
que el mundo sigue vivo
y podría ser reina
de tus tardes de domingo.

Soy reina sin reino,
sin hogar
y sin castillo,
soy reina del olvido
y de las cosas que he temido,
soy reina de los árboles
y reina entre el frío
del valle de costillas
de mi corazón vacío,
mas de pronto te ríes
como ríen los niños
y baten como alas
tus pestañas de felino
y se derrite el hielo
y noto el anhelo
de algún día ser reina
de tus tardes de domingo.

Desconfianza

 Igual que cuando fuera llueve Y decide una, por no enfermar, Por prevención, porque se conoce el cuerpo, Ponerse un abrigo, la bufanda, los...