lunes, 4 de marzo de 2013

Alma sangrante (05/01/11)


Supongo que es aquí donde los caminos
míos y tuyos se bifurcan ingratamente,
y dejan solo presente el tiempo ausente
que imaginamos en lugar de vivirlo.
Si fueras caballero,y yo gentil dama,
si supiéramos mentirnos mucho menos,
quizá el tiempo que hoy se nos desgrana
quedaría atrapado en nuestros dedos.
Historias muchas tantas existieron
que supieron de dolores y derrotas,
que no aprendieron a besar más bocas
que tienen más recuerdos de los que tenemos.
Mas solo tú en mi historia a mí me importas,
tan grácil escapando de amores
que anoche padecieron tus temblores
de ira,alegría,placer y miedo.
Supongo que otros más habrán sufrido,
y muchas noches más que las mías se habrá llorado,
y más tristes finales han existido
para hombros decaídos de humanos no alzados.
Quizá misericordia no conozco
y egoísmo me sobra,en cambio,
mas a mi sombra amo y antepongo
sin hallar en mi dolor ajeno espanto.
Tanto de mí tú has conocido
que cuando tú partiste me llevaste,
aún suplicando que de ti me apartase
en silencio ronco te persigo.
Querido y fiel amigo,mientras creces,
yo velo por tu sombra en noches tristes
siendo ángel de la guarda,aunque no reces,
de escombros de tus trozos tan sensibles.
Oírte hablarme ahora es tan extraño,
inusual tu verba desconocida,
y entonces rememoro nuestro antaño
donde tu vida siempre fue mi vida.
No sé si algún cabello te quita el sueño
o si cuando duermes,al contrario,
unos ojos despiertan tu desvelo,
y despierto,placer en ti otros labios.
No sé si has vuelto a amar,o si incluso
has llegado a arrancarme de ti completa
o sigo teniéndote en mí recluso,
mientras de ti me siento frágil presa.
Y siempre me pregunto al hallarte,
¿encontrarás en mí lo que ayer viste?,
¿seguiré siendo aquella a quien amaste?,
¿es tu amor por mí todavía virgen?
Yo clavo en tus pupilas mis pupilas
y nado entre ellas como antes,
mas cuando al fondo llego tú me esquivas
y hábilmente vuelves a marcharte.
Son tus pestañas sábanas nocivas
que cubren los secretos que al guardarte
me hacen el corazón astillas,
me vuelven el alma sangrante.
Sigo con tantas ganas de besar tu boca
como tenía hace tantos meses
y de sentir tu sólida y burlona
presencia que tan fácil cae a veces.
¿Cuánto tiempo ha pasado?Y aún te quiero.
Aún sigo intentando adivinarme
en alegrías tuyas,y en tus celos,
en ti domado y en ti salvaje.
Besar tu bello cuello,tierno hueso,
músculo caliente y vibrante,
sentir entre mis dedos tu pelo,
quitarme del dolor este alambre.
Supongo que aquí nuestros caminos
se hallan separados,inconscientes;
que tú y yo juntos ya no existimos
y el verte es una burla hiriente.
Si fueras caballero,y yo gentil dama,
si supiéramos mentirnos mucho menos,
no seríamos sentimiento que se devana
por parte mía en salir,por tuya es escondernos.
Historias muchas tantas existieron,
que supieron de dolores y derrotas,
que supieron de finales muertos,
que se vieron reemplazados por otros y otras.
Mas solo tú en mi historia a mí me importas,
tan grácil escapando de amores
que ayer eran de tu tierra señores
y hoy son en tu camino bastas rocas.
Supongo que otros más habrán sufrido,
y muchas noches más que las mías se habrá llorado,
pero tengo mis lágrimas grabadas en el sonido
de tu voz al decirme "te amo".
Quizá misericordia no conozco
y egoísmo me sobra,en cambio,
mi único deseo es el abril loco
donde fue mío tu defecto y tu encanto.
Tanto de mí tú has conocido
que cuando tú partiste me llevaste
encerrada entre pensamientos sombríos,
dolido rostro y anímicas cárceles.
Querido y fiel amigo,mientras creces,
yo velo por tu sombra en noches tristes
y aunque hayan pasado tantos meses
en mí tú sigues siendo aquel que fuiste.
Oírte hablarme ahora es tan extraño,
inusual tu verba desconocida,
como si tú nunca me hubieras querido tanto
y yo no te hubiese causado agonía.

Y si has vuelto a amar yo rezo al cielo,
le pido que feliz tú siempre seas
y venzas las tormentas y mareas
que sé que te descienden hasta el suelo.
Yo ayudarme no puedo a olvidar,
de amor aún,todavía,sé muy poco,
pero sé que corazones rotos
perdonan,callan,pero nunca olvidan.
No sé si has vuelto a amar,o si incluso
has llegado a arrancarme de ti completa
o sigues pareciéndote el inconcluso
dueño de mi eternidad inconcreta.

Y siempre me pregunto al hallarte,
¿encontrarás en mí lo que ayer viste?,
¿seguiré siendo aquella a quien amaste?,
¿es tu amor por mí todavía virgen?
Yo clavo en tus pupilas mis pupilas
y nado entre ellas como antes,
mas cuando al fondo llego tú me esquivas
y hábilmente vuelves a marcharte.

Son tus pestañas sábanas nocivas
que cubren los secretos que al guardarte
me hacen el corazón astillas,
me vuelven el alma sangrante.

Desconfianza

 Igual que cuando fuera llueve Y decide una, por no enfermar, Por prevención, porque se conoce el cuerpo, Ponerse un abrigo, la bufanda, los...