viernes, 23 de julio de 2010

Corta reflexión

Y qué es sino,la vida,una ironía?
Nacemos con ganas de crecer.
Vivimos por crecer,vivimos por vivir,vivimos por morir.
Morimos por volver a empezar.
Morimos por renacer,morimos por morir,morimos por vivir.
Nacemos con esas ganas de vivir la vida terrenal,morimos con esas ganas de alcanzar la vida eterna,que bien no es vida,sólo una forma efímera,etérea,de conservarse como polvo,como vecino de una estrella,que aquellos que viven todavía con quien compartiste tu camino puedan observar.
La vida es recuerdo,es nostalgia,es deseo.
La vida es un inconformismo constante,y la muerte es el conformismo obligado.
No estamos nunca satisfechos,nunca llenos,hasta que morimos,porque entonces estamos plenos,y aún así vacíos,porque...¿qué significa todo lo vivido?
Hay tantas,tantas vivencias pero...intentando encontrarles un significado lógico...no nos llevan a ninguna parte.
Podemos amar,podemos odiar,podemos tener hijos,o amigos,podemos tener un trabajo o vivir de ocupas en una casa,y no tiene un significado relevante a la hora de acabar,a la hora de alcanzar la plenitud y el vacío inmensos que supone el morir.
Me inflamas el corazón.
Dulce,suave y diabólicamente impuro.
Creo que me estás creando una adicción,
no sé,no me hagas caso,pero se rompe este muro
que coloqué en torno al dolor de mi aflicción,
y este corazón duro vuelve a su aspecto prematuro por tu voz,
soy como un alguien sordomudo que sólo producía tos
y algún ruído absurdo hasta que el tiempo silenció
cualquier latido oculto en alguno de aquellos "adiós";
podría jurar,pero no juro,porque al final siempre es que no.

El corazón es una rosa que va perdiendo pétalos...

El corazón es una rosa que va perdiendo pétalos,
cual capítulo de un libro cuya hoja se marchita
al frío del otoño invernal en que el fantasma tirita
rindiendo ya al completo su blanca magia a los eternos párpados.

El corazón se asemeja a un desierto de arena escaso,
innombrable con el nombre que un hombre pueda encontrarle,
tan vacuo,tan lleno,tan frío y tan agradable
que dan a menudo ganas de habitar en este inhábito.

¿Es el amor ya tan hermoso
como los hadas nos cuentan?
Ya no existen princesas dormidas,
y muertos los príncipes con sus ofertas.

El corazón se asemeja al león corriendo asustado,
pues es tan fuerte,pues es tan grande,pues tan salvaje
que se guía por instintos básicos,siendo sólo un ignorante
hasta dar con aquel muro que por nombre tiene pánico.

El corazón se asemeja a aquel de piernas inválido,
a aquel hombre de pecados encerrado en el no edén,
cuando intentan escapar,ninguno de los dos puede
y así,se queda el corazón,enterrado.

¿Es el amor,oh,tan bendito
tan suave calma para el alma?
Las princesas de hoy no distinguen
los guisantes en sus camas.

El corazón es como aquel horizonte tan lejano,
un largo y fino misterio del que todos sabemos el nombre,
mas nadie ha llegado a él,al fondo de un hombre
ni siquiera el mismo dueño y el intento siempre es vano.

El corazón es como aquel indigente allá tumbado,
sí,en la piedra fría y suave que llama su lecho querido
sus ruidos son los pasos,los del corazón latidos,
mas se parecen en que no tienen nada,y algún día tuvieron los dos algo.

¿Es el amor...no,no...
qué es el amor?
¿Es el pilar firme y seguro
de nuestro futuro?

¿O es esa piedra,de la que tanto se habla,
donde el humano siempre vuelve a tropezar?


Desconfianza

 Igual que cuando fuera llueve Y decide una, por no enfermar, Por prevención, porque se conoce el cuerpo, Ponerse un abrigo, la bufanda, los...